- Creación de la U. O. N.
- Crisis de los años 1955 a 1959
- Finalidades
- Algunos Hitos
- Facultad Regional Paraná
- Historias delas Carreras
Creación de la U. O. N.
Para explorar en los sentidos originarios de la Universidad Tecnológica Nacional, indudablemente hay que observar y referir a los propósitos y principios de una creación anterior: la Universidad Obrera Nacional.
Próximo a egresar los primeros graduados de las entonces conocidas como escuelas-fábricas, el Gobierno Nacional y la Confederación General del Trabajo (CGT) comenzaron a intercambiar sobre la posibilidad de implementar un ciclo superior: llevaría el nombre de Universidad Obrera Nacional y tendría por objeto formar “Ingenieros de fábrica”, capacitados para desempeñarse en procesos de producción. Los alumnos tendrían la obligación de trabajar en la especialidad y cursarían una carrera de cinco años.
En ese marco fue convocado el Ing. Pezzano, con antecedentes en la Comisión Nacional de Aprendizaje y Orientación Profesional (CNAOP). Además, el gobierno negoció con la Sociedad de Educación Industrial (dependiente de la Unión Industrial Argentina) la ocupación del predio de Avda. Medrano 951 de la Capital Federal.
A través de la Ley Nº 13299 del año 1948 se creó la Universidad Obrera Nacional. Los cursos de la nueva institución fueron inaugurados con la presencia del Presidente de la Nación, Juan Domingo Perón, el 17 de marzo de 1953. El acto se realizó en el edificio de la Regional Buenos Aires, por entonces sede también del Rectorado. En el mismo año, además, se habilitaron las Facultades Regionales Córdoba, Mendoza, Santa Fe y Rosario.
En 1954, seguidamente, se crearon las Facultades fundacionales: Regionales Bahía Blanca, La Plata y Avellaneda. Y en julio de 1955 la de Tucumán.
Crisis de los años 1955 a 1959
El primer Rector de la Universidad Obrara Nacional fue el sindicalista Cecilio Conditi, acompañado por el ingeniero Pezzano como vicerrector y formador del cuerpo docente, mayormente proveniente del Otto Krausse, de la Universidad de La Plata y de la Escuela Superior Técnica del Ejército.
A poco del inicio de las actividades, los estudiantes comenzaron a inquietarse por su futuro, especialmente porque no se sabía cuáles serían concretamente las incumbencias del “Ingeniero de Fábrica”. En diversas asambleas reclamaron que la U.O.N. se escindiera de la CNAOP e ingresara al régimen de las Universidades Nacionales.
Al producirse el Golpe de Estado de 1955 -autodenominado Revolución Libertadora- que derrocó a Juan Domingo Perón, las Universidades ingresaron en un período de agitación. Los estudiantes, en estado de Asamblea, exigieron la cesantía de los docentes vinculados con el gobierno anterior, de manera que durante un tiempo no hubo clases.
Los estudiantes de la U.O.N. también tomaron el edificio y negaron el acceso a las autoridades, pero constituyeron una comisión integrada por docentes, no docentes y alumnos que se hizo cargo de la administración de la Universidad y de la Facultad.
El Gobierno de Facto designó como interventor al Ing. Meoli, con expresas directivas para disponer el cierre de la U.O.N., considerada una creación demagógica del gobierno justicialista. Entre las medidas del interventor se cuenta el cambio de los planes de estudios, reemplazando los cursos de sindicalismo y adoctrinamiento político por los de Integración Cultural y Legislación. También introdujo un trabajo de tesis para los egresados, aunque pocos años después fue eliminado.
Contrariamente a lo esperado y al poco tiempo de estar a cargo de la Universidad, el interventor se constituyó en un defensor de la U.O.N: estaba convencido de que se trataba de una comunidad educativa seria y con deseos de progreso.
Por entonces, la Universidad todavía dependía de la CNAOP (que también estaba dividida), situación que no era favorable desde el punto de vista político a la hora de soñar con una Universidad Técnica de carácter nacional y dentro del régimen de autonomía como el resto de las Universidades Nacionales.
Al menos en dos oportunidades el Ing. Meoli tuvo que intervenir para frenar los decretos que disponían el cierre de la U.O.N., al tiempo que comenzó a trabajar en el proyecto de la futura Universidad Tecnológica.
“Su nombre es incorrecto, el nombre apropiado debería ser el de Universidad Tecnológica. Se han llenado los cargos docentes por concursos, y se revisarán los planes de estudios. La U.O.N. debe ser una entidad que sostenga cursos técnicos superiores, a la cual podrán ingresar quienes hayan cursado en forma satisfactoria el ciclo secundario de enseñanza técnica, y se desempeñan en trabajos afines a las disciplinas que estudian. La U.O.N. no interfiere ni se superpone con las Universidades Nacionales: los estudios son de naturaleza distinta aunque de nivel comparable…”, dijo el interventor y se reprodujo en diario La Prensa el 18 de abril de 1956.
Los estudiantes resolvieron no dar por concluidos sus estudios hasta lograr su título de “Ingeniero” sin el aditamento “de fábrica” y lograr la autonomía de su Universidad. Eso explica la gran cantidad de egresados que formarían la primera camada, algunos de los cuales actualmente continúan desarrollando su carrera docente en nuestra Universidad.
En esos días, una Asamblea de los claustros propuso el nombre de “Universidad Técnica”, aunque luego se impuso la denominación “Tecnológica”, por iniciativa del Ing. Cesar García.
El rector interventor, junto con algunos decanos y docentes, comenzó a elaborar el proyecto de ley que le daría autonomía a la UTN y por ende la separaría de la CNAOP. La movilización estudiantil cubrió las paredes de los accesos ferroviarios de Buenos Aires con enormes carteles que rezaban: “UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA”, mientras ya comenzaban a aparecer en los diarios avisos solicitando Ingenieros Tecnológicos. Es por esta razón que cuando se planteó el debate parlamentario sobre la nueva ley -durante el gobierno constitucional de Arturo Frondizi-, un diputado dijo que el nombre no estaba discusión porque ya “estaba en la calle”.
Finalidades
La ley N° 14855, de creación de la Universidad Tecnológica Nacional, establece en su artículo segundo las siguientes finalidades:
-Preparar profesionales en el ámbito de la tecnología para satisfacer las necesidades correspondientes a la industria, sin descuidar la formación cultural y humanística que los haga aptos para desenvolverse en un plano directivo dentro de la industria y la sociedad, creando un espíritu de solidaridad social y mutua comprensión de las relaciones entre el capital y el trabajo.
-Promover y facilitar las investigaciones, estudios y experiencias, necesarias para el mejoramiento de la industria, y asesorar dentro de la esfera de su competencia a los poderes públicos y las empresas privadas en la organización, dirección, fomento y promoción de la industria nacional.
-Establecer una vinculación estrecha con las demás universidades, con las instituciones técnicas y culturales, nacionales y extranjera, con la industria y sus organismos representativos, y con las fuerzas económicas del país.
Algunos Hitos
-Articulación de los estudios secundarios: en virtud de la sanción de la ley 15948 del año 1961 se estableció que el ingreso a la UTN no solo quedaba reservado a los egresados de escuelas técnicas.
-Estatuto 1963: el 31 de agosto de 1962 se reunió la Asamblea Universitaria que aprobará el primer Estatuto de la Universidad. El PEN lo aprobó al año siguiente, de ahí que se lo suele denominar como el Estatuto de 1963.
-Equiparación legal: mediante la aprobación de la ley 16712 del año 1965, quedó establecido que serán aplicables a la Universidad Tecnológica Nacional todas las disposiciones legales reglamentarias válidas para la Universidades Nacionales, tanto las dictadas hasta el presente como la que se dicten en el futuro. De este modo, nuestra Universidad quedó definitivamente incorporada al régimen de Universidades Nacionales.
-Con el advenimiento del régimen de facto en marzo de 1976, se inicia en el área de educación un “redimensionamiento” de las Universidades. El primer proyecto ministerial proponía la desaparición de la UTN, incorporando sus unidades académicas a otras Universidades. Debido a la determinada reacción de integrantes de nuestra comunidad universitaria, que contaba con vinculaciones dentro de sectores de las Fuerzas Armadas, y de la Industria, se logró que el proyecto fuera modificado. Sin lugar a dudas el crecimiento sostenido de la UTN a lo largo de su esforzada existencia, más el prestigio e influencia alcanzados por sus graduados, fueron razones de peso que seguramente se consideraron. El gobierno militar tuvo que dar marcha atrás y la Universidad salió fortalecida.
-Situación a partir de 1983: con el retorno de la democracia, el 10 de diciembre de 1983, se abre una nueva etapa en la vida de las Universidades Nacionales en general, y en la UTN en particular. Se realizan elecciones y concursos públicos de docentes después de muchos años y, finalmente en 1985 se dio su propio gobierno autónomo. Se crearon nuevas unidades académicas, cubriendo de este modo casi todo el país. Se comenzaron a dictar nuevas carreras y se mejoraron los planes de estudios actualizando sus contenidos temáticos de acuerdo al avance tecnológico. En síntesis, se consolidó un crecimiento institucional, que nos permite afirmar, con orgullo, que la Universidad Tecnológica Nacional es hoy en día la mayor proveedora de ingenieros al mercado laboral argentino.
Facultad Regional Paraná
La FACULTAD REGIONAL PARANA comenzó sus actividades académicas en el año 1964 en la Escuela Normal “José María Torres”.
A través de la Resolución de Consejo Superior Nº 33/64, con fecha 16 de mayo y firmada por el Rector de la UTN, Ing. Juan Sábato, se autorizó a la Facultad Regional Santa Fe a dictar el primer año de la carrera Ingeniería, en las especialidades Mecánica, Eléctrica y Construcciones, en la ciudad de Paraná.
El inicio de los cursos dio respuesta a un grupo importante de jóvenes de nuestra provincia, que junto a profesores y personal de la Escuela Industrial Nº 1 de la ciudad de Paraná, hicieron realidad el sueño de contar con una extensión universitaria que permitiera a sus jóvenes una salida profesional.
En el año 1966 se crea el segundo año, pero el desarrollo de las actividades académicas comenzó a sufrir alteraciones por una serie de factores, tales como diferencia de criterios sobre la instalación de cursos, presupuesto, traslado de docentes, problemas con el crecimiento de su población y la necesidad de nuevos espacios y laboratorios, entre otras.
Los inconvenientes señalados comenzaron a generar malestar e incertidumbre. De este modo se originó una movilización constante de alumnos, fuerzas vivas y entidades oficiales. Fue a partir del año 1968 que los cursos pasaron a conformar la Delegación Paraná, bajo la responsabilidad y dependencia de la Facultad Regional Santa Fe.
La movilización de los estudiantes, apoyados por un puñado de docentes, hizo posible la subsistencia de la Delegación Paraná. Además, luego de un análisis minucioso sobre lo realizado, incluido el estudio de factibilidad, se la institucionalizó con el carácter de DELEGACIÓN ENTRE RÍOS, por Resolución Nº 49/69 del Consejo de Rectores de Universidades Nacionales.
El Rector Ing. José Colinas firmó el 29 de diciembre de 1969 las Resoluciones: Nº 487/69 derogando la Resolución Nº 33/64 y creando la Delegación Entre Ríos con sede en la Ciudad de Paraná, constituida por las delegaciones: Concepción del Uruguay, hoy Facultad Regional Concepción del Uruguay y Paraná, hoy Facultad Regional Paraná. Por otra parte y por Resolución Nº 488/69, se designó al Dr. David Pérez del Viso como Delegado del Rector.
A partir del año 1970 la Delegación Paraná trasladó su sede, desarrollando todas sus actividades en la Escuela Nº 1 “Del Centenario”.
Tres años después, el 2 de noviembre de 1972, en la ciudad de Córdoba, el Consejo Superior de la Universidad Tecnológica, por Resolución Nº571/72, aprobó la transformación de la Delegación Paraná en Facultad en Organización, de acuerdo con la Ordenanza 131 del mismo año, para ser finalmente denominada FACULTAD REGIONAL PARANÁ, por disposición de la Tercera Reunión del Consejo de Rectores de Universidades Nacionales del día 18 de mayo de 1973.
Se culminó de este modo un proceso de suma relevancia para la Enseñanza Superior en nuestra provincia, como fue incorporar una importante propuesta educativa para la juventud de la provincia de Entre Ríos.
Finalmente en 1974, con la culminación de los estudios como Ingeniero Electricista de Miguel Ángel SAAVEDRA, la Facultad Regional Paraná otorgó el diploma correspondiente al primer graduado de esta casa de estudios.
Reestructuraciones educativas enmarcadas en la política nacional diseñada por la dictadura en el año 1979, generaron, entre otras disposiciones, limitaciones de carreras. Particularmente en la Facultad Regional Paraná dejaron de dictarse las carreras de Ingeniería Eléctrica e Ingeniería mecánica y en la Universidad de Entre Ríos ocurrió lo mismo con Ingeniería Electromecánica.
Ante esta disposición oficial, ambas Universidades suscribieron un Convenio, en virtud del cual la Universidad Tecnológica Nacional, a través de la Facultad Regional Paraná, asumía a su cargo la carrera de Ingeniería Electromecánica de la Universidad Nacional de Entre Ríos y los alumnos de 2do. a 6to. año, continuarían los estudios, según el plan de la Universidad de origen. Se llevaron a la práctica las cláusulas del citado Convenio y a partir de 1980, comenzó en Tecnológica el 1er. año de la carrera en cuestión con un plan de estudios estructurado según las normas académicas de la UTN.
Con el inicio de una nueva etapa democrática y consustanciados los claustros universitarios de la importancia histórica del momento, se resolvió en el aspecto educativo, la normalización de las Universidades. La instrumentación y substanciación de los concursos docentes, la organización de los claustros y el co-gobierno universitario, fueron algunos de los instrumentos primarios considerados.
En la Facultad Regional Paraná se designó al Ing. Luis F. B. FIRPO como Decano Normalizador, en una etapa que comenzó en marzo de 1984 debiendo finalizar en diciembre de 1985, mes en el que constituida la Asamblea de Claustros elegiría por cuatro años al Decano.
El 15 de diciembre de 1985, por primera vez en la historia, resultó electo, por mayoría y en forma democrática, para cumplir esta función, quien venía desempeñándose como Decano Normalizador, el Ing. Luis F.B. Firpo, siendo además la primera Institución Educativa Superior de la Provincia que alcanzó este objetivo.
Durante la gestión de Firpo, las actividades académicas y administrativas de la facultad ya fueron trasladadas a su nuevo emplazamiento en Av. Almafuerte 1033. Además, en el mismo mandato y por Resolución del Consejo Superior Universitario se creó la carrera de Ingeniería Electrónica, que a partir del año académico 1987 inició el dictado de sus cursos.
Con el transcurrir del tiempo y cumpliendo con su legislación estatuida, la Asamblea de Claustros designó en el cargo de Decano, en diciembre de 1989, por un periodo de cuatro años al Ing. Raúl Arroyo.
En diciembre de 1993, en tanto, comenzó su gestión al frente del decanato el Ing. Mauricio Friedrich, mientras que a partir del año 1998 y por un nuevo período de cuatro años la Asamblea de Claustros de la Regional eligió, una vez más, al Ing. Arroyo. En el año 2005 fue electo el Ing. José Navarro, quien lamentablemente falleció a los 13 días de asumir el cargo. Una nueva Asamblea debió sesionar y en marzo de 2006 fue electo decano el Ing. Omar Berardi, quien fue reelecto en dos oportunidades y finalizó sus funciones en diciembre de 2017.
Luego de las elecciones realizadas el 8 de septiembre de 2017, donde resultó elegido por amplia mayoría, Alejandro Carrere asumió el cargo de decano de esta casa de estudios el 29 de diciembre de 2017.
Durante la primera gestión de Carrere al frente de UTN Paraná, la Facultad logró recuperar su incidencia en la región a partir de una activa política de vinculación. Se lograron avances en la oferta académica, tanto en carreras de pregrado como de posgrado, y hubo una clara apuesta al reacondicionamiento edilicio y también al equipamiento tecnológico de la facultad. El extensionimismo fue uno de los pilares del hacer cotidiano y también se acentuó la tarea de investigación.
El desafío que representó la pandemia para todo el sistema educativo fue una muestra clara del trabajo realizado: la facultad nunca cerró sus puertas y se adaptó a las circunstancias cumpliendo con su tarea de seguir garantizando el acceso a una educación universitaria, pública, gratuita y de calidad.
En diciembre de 2021, luego de imponerse en elecciones, Carrere asumió su segundo mandato al frente de esta casa de estudios y ya en el inicio mismo de la gestión planteó un objetivo clave: la implementación de una nueva carrera de grado. UTN Paraná trabaja en la actualidad para lograr que estudiantes de toda la región puedan estudiar Ingeniería Ambiental en esta casa: la casa de la ingeniería en Paraná.
Historias de las Carreras
El 18 de mayo de 1973, la tercera reunión del Consejo de Rectores de Universidades Nacionales jerarquiza esta casa de estudios con la denominación “Facultad Regional Paraná”.
Un grupo de jóvenes con deseos de superación y amor por las disciplinas técnica, ayudados por padres y con el acompañamiento de docentes de la Escuela Nacional de Educación Técnica Nº 1 de Paraná, encaró decididamente los cursos de Ingeniería de la Universidad Tecnológica en la ciudad
-Supervisiones permanentes y exigencias no generalizadas no diezmaron los anhelos juveniles. Y aún en un proceso de amenazas y cierres temporales, la tecnológica abrió sus puertas a partir del año 1965.
-Con las inscripciones en una casa de familia y el cursado en la escuela Normal, se inició el cursado como un aula de la Reg. Santa Fe, con las especialidades de la misma.
-Las características de las políticas uniformes y unitarias de los gobiernos tecnocráticos militares de la década del 70 determinaron las mismas especialidades (mecánica, eléctrica y construcciones) que se dictaban en Santa Fe, pensando que la situación geográfica era determinante de su idiosincrasia social cultural. Con esa idea, entrada en la década de optimización de recursos, se propiciaba la eliminación de Construcciones en Santa Fe y de Mecánica y Eléctrica en Paraná. Esto se materializó cuando, con el objetivo de transferir la especialidad de Electromecánica de la joven UNER, se eliminaron las especialidades de Mecánica y Eléctrica.
-Un argumento o fundamento significativo más, para futuras aspiraciones, se manifiesta cuando a principio de los 80´ se interrumpe el tránsito por el Túnel Subfluvial y el litoral: la ciudad de Paraná se aísla del continente. La Regional Paraná por esos años y a los efectos de que el altísimo porcentaje de estudiantes que cursaban en Santa Fe no perdieran el año, dicta los cursos de Analista de Sistemas.
-La experiencia y el conocimiento concreto de la capacidad demostrada en los cursos de analista animan a solicitar al Consejo Superior Universitario dicha carrera para la regional, la negación posibilitó que el gobierno provincial con estos antecedentes y su propia iniciativa creara el Instituto Superior de Informática provincial a quien con los años la Regional conviniera ser la Institución Universitaria que acreditara sus Títulos.
-La inexistencia en la región de una carrera de punta y la necesidad para la zona como la labor profesional y apoyatura comunitaria fueron artífices y fundamento primordial para solicitar y obtener la especialidad en Electrónica, iniciando su cursado a partir del ciclo 1987.
-A partir del año 1988 por decisión universitaria se comienza con el dictado de los complementos de Ingeniería Civil, transformando la carrera de Ingeniería en Construcciones de Obras en Ingeniería Civil a partir de la Ordenanza de 1994.
-Continuo, incesante y permanente ha sido a través de los años la lucha por insertarse y lograr satisfacer las necesidades de su sistema productivo regional, manteniendo propósitos y objetivos rectores y características fundamentales de la Universidad.